SAB©REAND© PALABRAS

UN ESPACIO DE AUTOR PARA LAS PASIONES VIRTUALES:
Las pasiones que aquí se muestran serán con derechos de autor. Ruego a quienes accedan a este espacio no apropien palabras ajenas. La literatura es personal y quien la fusila demuestra incapacidad para vivir e imaginar. Aunque parezca sueño, saboreemos la palabra en el espacio virtual.

Mi nombre: SAB©REAND©
Mi origen: Asturias, Spain
Definiéndome: Soy un constructor-devorador de palabras e imágenes
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17.5.05

Líneas apasionadas




Y así como la prosa apasiona al mundo, la línea hace otro tanto desde tiempos inmemoriales. Al menos eso pensaba Egon Schiele en 1910 cuando trazó las de esta Muchacha desnuda recostada. Schiele decía que había pasado a través de Klint, aunque las fechas no concuerdan.





Gustav Klint, en 1913, y con esta Muchacha semidesnuda sentada con los ojos cerrados, estaría de acuerdo conmigo en que si el verbo se hizo carne para que ésta fuera prosa, ¿que razón habría para que la carne no se convirtiera también en pura línea?

5 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Y digo yo , con la coña del arte siempre salen tias en pelotas?
Pues haver cuando poneis a un tio haciendose una "pajilla".
Porque tambien es arte verdad?
xurumbel&company

10:16 p. m.  
Blogger SAB©REAND© said...

Cada cosa a su tiempo, xurumbel&company, porque de todo hay en esta viña, aunque carezca de amo. El propio Egon Schiele tiene un autorretrato masturbándose, que será publicado en breve, para que nadie diga que hacemos distinciones y que con la coña del arte solo se publican mujeres desnudas —tus tías en pelotas—, porque habrá para todos los gustos. Recuerdo que Miguel Ángel y Leonardo da Vinci, tienen unos dibujos magistrales de hombres. Seguro que te impresionarán. De otro modo, me gustaría que comprendieras la diferencia entre tu "haver", el infinitivo "haber", y el "a ver" —de "mirar"— que deberías haber escrito en tu comentario. Gracias por hacerlo. Egon Schiele masturbándose, será publicado no te quepa duda. A ver que comentas luego sobre esa pintura. Tiene su fuerza, su expresión. Al menos esa es mi opinión.

10:33 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

moltes gracies per la teva correcció ,tens tota la rao "haber, i aver" ho sento molt . la proxima begada ho fare molt millor.

xurumbel&company

11:03 p. m.  
Blogger SAB©REAND© said...

¡Guau!, ¿un xurumbel&company que habla catalán? Eso sí que es un aporte multilingüe, Catalán, caló encastizado e inglés, todo en el mismo paquete. Me parece correcto. Mi intención no era de menoscabo, solo un leve toque de atención sobre mi idioma. Lástima que mi capacidada lingüística no alcance a todos los idiomas y tenga que conformarme con el que me parieron. Haz lo propio con el tuyo. De nuevo, gracias.

11:11 p. m.  
Blogger SAB©REAND© said...

A cuento de esas "pajillas" de que hablabas ayer —my dear xurumbel&company— y porque la pasión también tiene su parte ineludible de fisiología, además de esos genésicos ciclos lunares tan poéticos, inserto dos artículos de Tatiana Goransky, una argentina polifacética, publicados en El Interpretador, porque, si el verbo se hizo carne, para ello habría alguna razón diferente a la meramente poética. No todo lo que apasiona tiene que ser necesariamente fantástico, ¿no te parece?

JE SUIS ROUGE (© Tatiana Goransky)

¿Qué pasaría en nuestra cultura occidental si en lugar de la imagen clásica de la mujer en posición fetal, con bolsa de agua caliente entre sus piernas y murmurando palabras de dolor e insultos al universo, estuviéramos acostumbrados a ver a las mujeres agasajadas hasta el exceso durante los días que dura su menstruación? Grandes fiestas y millones de “qué linda que estás” rodearían a las hembras del mundo mientras éstas salen de compras justo en “esos alegres días”, recibiendo comentarios del estilo de “qué bonitos y cálidamente hinchados que están tus pechos hoy” o “me encantaría acariciar tu cara que se puso más redonda y roja y está francamente preciosa”. Cientos de “noto que estás un poco más hambrienta de lo normal y me encantaría poder prepararte otra porción de esto que tanto te gustó, querida” recorrerían las calles de nuestra ciudad y cada tanto tendríamos, tal vez, el honor de escuchar dulces serenatas interpretadas bajo las ventanas de las protagonistas...

“Dulce mujer marina
Tu es rouge et je suis perdu”


Según la película argentina “Je suis rouge” que documenta y ficcionaliza la relación entre las mujeres y su menstruación, al mayor porcentaje de las entrevistadas, todas entre los 18 y 30 años, nunca le han practicado sexo oral durante su período. Y aunque en un principio la mayoría de ellas acusa a los hombres de negarse a hacerlo, finalmente se comprueba que casi ninguna de ellas se lo permitiría; ya sea por vergüenza, por el asco que les provocaría ver a su compañero con la boca manchada (“boca de payasito”), por el olor submarino que a ellas mismas les disgusta, o simplemente porque ellas jamás lo harían de estar en esa misma posición.
Resultados como estos nos obligan a preguntarnos ¿cuán rojas están las mujeres cuando están rojas y cuán rojos están los hombres cuando las mujeres están rojas?
Es incuestionable que numerosos miembros del género masculino se niegan a sumergirse en el sexo de sus compañeras cuando éstas están “indispuestas”. Sin embargo, existe también un porcentaje que lo hace sin titubear, convencido de que el proceso natural en cuestión no tiene por qué despertarles sensaciones extravagantes. Pero eso sí, no hay nada como un poco de duda para alejar el deseo de la habitación. Para ser un auténtico profesional en el arte del sexo oral hay que regirse por una premisa esencial e inquebrantable:
“Después de que hayas empezado, no importa si estás aburrido, agotado, mareado, nauseabundo, acalambrado, dolorido por tu reciente extracción molar, resacoso, preocupado porque tu familia está por llegar para el asado de los domingos o simplemente arrepentido, nunca, bajo ninguna circunstancia... lo demuestres”. Y aquí, en esta ilustre frase, radica todo el secreto: llevar el emprendimiento hasta sus últimas consecuencias, cueste lo que cueste, sin que se note el esfuerzo, por nulo, pequeño o gigantesco que éste sea. Esta regla no varía dependiendo de los ciclos femeninos y se aplica a hombres y mujeres por igual, lo que la convierte en una regla reguladora, tiránica, básica e inapelable.
Pero retomando la pregunta inicial, ¿qué pasaría si la mujer menstruante fuera venerada? ¿Se la desearía más? ¿Sería, tal vez, en ese caso, un honor practicarle a la visitada un cunnilingus? Imaginemos que sí. Que la mujer sangrante es un ser cotizado. Que todos la llaman para salir justo en ese momento del mes, que los hombres (transportando diminutos calendarios marcados con crucecitas rojas en los bolsillos de sus pantalones) preguntan obsesivamente a sus novias y amigas sus fechas para no perderse de llevarlas a la cama los días 28. Que hay peleas entre amigos para ver quién usa el único cuarto del departamento cuando sus dos mujeres están en “esos maravillosos días”, que en lugar de las flores es común llevar a las citas un paquete de toallitas perfumadas o una cajita de tampones (previa consulta a la mujer por su tamaño preferido), que el mayor de los honores es llamarse Andrés... ¿Sería justo, entonces, decir que su sangre sabe y huele diferente? ¿Que ni a hombres ni a mujeres les preocupa verdaderamente el “payasito”? ¿Que, por festejada, la sangriza se convierte en el mayor condimento sexual para la pareja del siglo XXI?
Tal vez lo ideal sería ponerlo a prueba: este mes, el día 25, espero tarjetas de felicitación…

EL DERECHO AL ORGASMO (© Tatiana Goransky)

Más de uno se sentirá amenazado al ver por escrito que el orgasmo es un derecho universal. Derecho que está inscripto en el punto número 5 de la famosa declaración de los derechos sexuales bajo el título del "Derecho al placer sexual". Quien no respete esta cláusula será merecedor de un castigo acorde por haber violado este tratado universal y se someterá al fuero específico sin queja ni reclamo.
¿Qué pena podríamos impartirle entonces a quien incumpla este contrato? ¿A quien no respete sus obligaciones contractuales cueste lo que cueste? ¿Será la cárcel una exageración? ¿Cuántos años podríamos otorgarle a alguien que se distrajo en medio de una fellatio? ¿A quien deserotizó a su compañero con un fugaz comentario acerca del estofado quemado justo en medio de la cópula? ¿A quien retiró su mano justo en el momento de mayor rigidez clitoriana? ¿A quien decidió dormirse luego del coito sin importar la insatisfacción de su partenaire? ¿10 años serán demasiados? ¿Se aplicará la pena de muerte en ciertos casos?
Demás está decir que podríamos encontrar otro tipo de castigo, como por ejemplo una buena tasa de interés/cláusula penal: "Aquel que no respete esta disposición deberá pagar con intereses duplicando o triplicando (a razón de) orgasmos según sea la gravedad del hecho en el que haya incurrido" (podría decir el nuevo documento redactado por la corte internacional).
Está claro entonces que entre los miembros de una pareja (sea ésta estable o pasajera) existirá desde ahora en adelante un contrato implícito que actuará de manera inconsciente durante el acto en cuestión. En el caso de una pareja estable, las cláusulas legales del contrato dirán algo parecido a lo siguiente (teniendo en cuenta que "El activo" y "El pasivo" son funciones variables, y adecuando el contrato según sea necesario)
Ante el incumplimiento de la cláusula número 5 por parte de EL ACTIVO, quedará constituido en mora de pleno derecho, sin necesidad de interpelación judicial alguna, pudiendo El PASIVO a su exclusivo arbitrio optar por cualquiera de los siguientes procedimientos: A) Declarar resuelto de pleno derecho el presente contrato, debiendo abonar EL ACTIVO una indemnización por daños y perjuicios equivalente al 25 por ciento de los orgasmos percibidos hasta el momento de la rescisión; B) Recurrir a las autoridades para que éstas impartan el castigo adecuado.
Se deja constancia que ante hechos imponderables, casos fortuitos o de fuerza mayor que impidan cumplir con las cláusulas del presente contrato (anomalías físicas, falta de erección, vaginitis, la irrupción repentina de una estampida de vacas Heresford en la habitación o cualquier otra situación incompatible con el acto amoroso), ambos quedan eximidos del mismo, o de cualquier indemnización u otros. En caso que suceda alguna de las variantes mencionadas en esta cláusula, se notificará vía telegrama simple al domicilio acordado de antemano.
Deberá estar claro ahora que una noche de falso placer puede convertirse en una verdadera sentencia automática. Que lejos de asimilarse a la "sentencia previa" requiere de la negligencia durante el acto para poder ser absorbida por este nuevo sistema punitivo. Húyale conscientemente, ocúpese, concéntrese y por favor no vuelva a decir "un orgasmo es sólo un orgasmo" ya que desde el momento en que se redactó el documento internacional, el orgasmo se convirtió (potencialmente) en el mayor motivo de guillotina.
Como verán, los derechos sexuales son solamente un marco teórico en donde nosotros debemos devenir creativos. Y he aquí mi contribución personal: invito a todos a redactar una constitución sexual abarcadora, la cual armaré con todas vuestras contribuciones y publicaré en esta misma columna en cuanto haya recibido material suficiente.

11:34 a. m.  

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